Hong Kong. AP. Decenas de miles de personas, entre maestros y padres, participaron ayer en una manifestación por las calles de Hong Kong en protesta por las clases de patriotismo chino pues temen sean un intento de lavado de cerebro a sus hijos; el indicio más reciente de la creciente ola de descontento por la influencia de Pekín en el enclave.Los estudiantes y partidarios de la democracia desfilaron hasta la sede del gobierno de Hong Kong para protestar por el nuevo programa que las autoridades quieren que las escuelas utilicen en el próximo año escolar a iniciarse en setiembre.
La multitud teme que las clases sean utilizadas para convencer a los niños para que respalden al Partido Comunista chino. El Gobierno lo niega y afirma que su fin es cimentar el orgullo nacional chino.
La polémica estalló tras circular la noticia de que grupos defensores de Pekín publicaron un libro para uso en escuelas que resalta las virtudes del sistema de partido único.
“China quiere que la próxima generación de Hong Kong conozca su grandeza sin conocer su aspecto malo. El libro es muy partidista y por ello me opongo”, dijo Chan Yip-Long, escolar de 9 años.
La protesta es el indicio más reciente del creciente descontento en Hong Kong por la influencia de China, 15 años luego de que el gobierno comunista obligara a Gran Bretaña a abandonar su colonia; tras más de un siglo de permanencia.
Las tensiones han sido atizadas por la creciente diferencia económica y el gasto desenfrenado de los chinos acaudalados, que han encarecido los bienes raíces y los alquileres de los comercios.
En Hong Kong también hay molestia por el desarrollo democrático local. Pekín prometió que Hong Kong podrá elegir a su líder en el 2017 pero sin ofrecer plan alguno.