Nueva Democracia, ganadores de las elecciones en Grecia, intentará formar un Gobierno de coalición. Antonis Samaras, lider del partido, convocó poco después de conocer el triunfo a los partidos políticos griegos a la formación de un gobierno de concentración, si bien insistió en que votar por su partido era votar por el euro y que los griegos habían decidido seguir en la moneda única. "Invitamos a todas las fuerzas que comparten estas conviccinoes a participar en un gobierno de salvación nacional. No hay tiempo que perder. No caben las políticas de partido", proclamó Samaras en la sede de Nueva Democracia de Atenas.
"Han votado por el empleo, la justicia y la seguridad. No más aventuras", declaró Samaras haciendo referencia a la postura contraria al rescate que defendía el segundo partido más votado, la Coaliciónd de la Izquierda Radical (Syriza). .
Samaras declaró que los sacrificios del pueblo griego iban a servir para algo y que la apuesta europeísta de los griegos era un gran momento para Grecia y para el resto de Europa. "Queremos salir de la crisis lo más pronto posible. Vamos a trabajar con la UE para poner en marcha políticas de desarrollo y para parar el desempleo", aseguró.
FORMACIÓN DE GOBIERNO
Ahora Samaras y Nueva Democracia tienen un máximo de 10 días para formar Gobierno. La unión natural sería con Pasok, pero todavía no está claro que esto vaya a ser fácil pues en las pasadas elecciones del 6 de mayo éstos pusieron como condición para entrar en el Gobierno que también lo hicieran los de la izquierda radical de Syriza, algo que no sucedió.
Ahora Samaras y Nueva Democracia tienen un máximo de 10 días para formar Gobierno. La unión natural sería con Pasok, pero todavía no está claro que esto vaya a ser fácil pues en las pasadas elecciones del 6 de mayo éstos pusieron como condición para entrar en el Gobierno que también lo hicieran los de la izquierda radical de Syriza, algo que no sucedió.
Es una carrera a contrarreloj pues antes del 30 de junio el Parlamento griego debería aprobar nuevos recortes de unos 11.000 millones de euros. Un recorte que si no sale adelante daría lugar al bloqueo de un nuevo préstamo por parte de la UE y eso significaría que Grecia no podría hacer frente al pago de las pensiones y de los sueldos de los funcionarios.
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