Damasco, Siria.- El diplomático argelino Lakhdar Brahimi podría convertirse en el nuevo enviado especial de la ONU a Siria tras la renuncia de Kofi Annan, según confirmaron hoy fuentes diplomáticas desde Beirut.
El ex ministro del Exterior argelino, de 78 años, tiene "buenas opciones" de convertirse en el mediador de la ONU y la Liga Árabe, según un diplomático occidental que tiene acceso a las negociaciones. Brahimi ya trabajó como enviado especial de la ONU en Afganistán e Irak.
El secretario general del organismo, Ban Ki-moon, no se pronunció sobre estos rumores, pero uno de sus portavoces señaló que la organización nombrará pronto al sucesor de Annan. "No queremos dejar pasar mucho tiempo porque no queremos que haya un vacío en ese puesto", dijo hoy en Nueva York, sin precisar la fecha.
"Claro que nos han propuesto muchos nombres en los últimos días, pero no lo comentaremos", añadió.
Annan renunció hace una semana por la falta de compromiso de paz manifestada por las partes en conflicto y la falta de unidad entre las potencias con derecho de veto en el Consejo de Seguridad.
Ante los rumores de su reemplazo, la oposición siria minimizó la importancia de la decisión. "La cuestión no es sólo reemplazar a un enviado por otro", dijo George Sabra, portavoz del opositor Consejo Nacional de Siria. Según Sabra, a menos que la ONU se decida firmemente a implementar el plan de paz de Annan para poner fin a la crisis, nombrar a Brahimi no hará una gran diferencia.
Mientras tanto, en la norteña ciudad de Alepo al menos once personas murieron al impactar un misil en la panadería del distrito de Tarq al Bab, donde varias personas se habían reunido a comprar pan a la puesta de sol para poner fin al ayuno en Ramadán, señaló el activista Bassam al Halabi.
Además, los rebeldes se han replegado a un distrito vecino tras ser expulsados del suburbio estratégico de Salaheddin. "Estamos preparando un contraataque", dijo desde el terreno a dpa un comandante del Ejército Sirio Libre.
"Nuestros combatientes están infringiendo fuertes bajas al Ejército del régimen", dijo el comandante Omar al Halabi a dpa desde Alepo.
El Consejo Nacional Sirio señaló que la histórica ciudadela de Alepo resultó dañada tras los fuertes bombardeos, aunque la información no pudo ser verificada.
Al menos 95 personas, entre ellas 56 en Alepo, murieron hoy en todo el país, según los Comités de Coordinación Local.
El número de refugiados que huyeron de Siria a países vecinos alcanzó al menos 147,000 la semana pasada, ante el aumento de la violencia en Alepo y otras regiones, informó el Ato Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en Ginera.
Y la cifra no es definitiva: miles de personas esperan poder registrarse en Líbano. Turquía tuvo más de 6,000 nuevas llegadas sólo esta semana y ya son 50,000 los que llegaron al país desde el inicio del conflicto. En Jordania hay 46,000 registrados, en Líbano 37,000 y en Irak 14,000, según ACNUR.
Mientras tanto, el Reino Unido anunció hoy que dará ayuda "no letal" por valor de cinco millones de libras (7.7 millones de dólares/6,4 millones de euros) a las fuerzas rebeldes de Siria, según palabras del ministro de Relaciones Exteriores William Hague.
"Ante la ausencia de avance diplomático, Reino Unido hará más. Ampliaremos nuestro apoyo al pueblo sirio y a la oposición política siria con otros cinco millones de libras en asistencia práctica no letal", aseguró Hague.
La ayuda servirá para proteger a los grupos opositores no armados, a los activistas de derechos humanos y civiles de la violencia, añadió el ministro. La asistencia se sumará a la ayuda humanitaria e incluirá equipos técnicos, radios y suministros médicos, pero no armas, aseguró.
El anuncio, que cambia la política británica hacia Siria, se enmarca en los esfuerzos por preparar el futuro tras la caída del presidente Bashar al Assad y se centra en la cooperación sobre todo con el Ejército Sirio Libre.
"El riesgo de un caos total y un vacío de poder en Siria es tan grande que debemos construir relaciones con aquellos que podrían gobernar Siria en el futuro", indicó un portavoz del Ministerio.
Desde el comienzo de las protestas contra el régimen de Bashar al Assad hace 17 meses han muerto 17,000 personas, la mayoría civiles, según las más recientes estimaciones de la ONU.
La conferencia para Siria celebrada el jueves en Teherán terminó sin resultados concretos. El ministro del Exterior, Ali Akbar Salehi, sólo pudo resumir al término del encuentro que los 30 participantes se pronunciaron a favor de que acabe la violencia y "por una solución nacional sin intervención extranjera".
En la cita estuvieron presentes países que, como Irán, apoyan abiertamente a Al Assad o al menos están en contra de un cambio de régimen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario